EL RETO
Hace tiempo leí una frase que me gustó mucho: se refería al miedo, era una frase de Michel Jordan “el miedo es una ilusión, el miedo no es real”
Me agradó la perspectiva; si se trataba simplemente de una ilusión, debía tener truco como el de los magos que nos hacen creer que parten el cuerpo de una persona, o la desaparecen dentro de una caja para volverá a aparecer… de pequeños esos trucos nos causaban una tremendo impacto, de grandes nos parece simpático esos efectos que desde cualquier ángulo lucen falsos.
Ciertamente una cosa es hablar de nuestros miedos y fobias “de lejitos”, algo diferente es enfrentarlos.
Te voy a platicar una anécdota que cambió mi vida, un día de tantos descubrí que tenía un temor tan grande que me impedía llevar una mejor calidad de vida, como todos los miedos aprendidos este miedo surgió de la nada, no puedo explicarte la forma tan fuerte con la que me autosugestione al punto que me paralizaba, me temblaban las piernas y empezaba a sudar a mares con tan solo pensar en ello.
El miedo no es real
Un buen día decidí que no deseaba ni necesitaba vivir presa de mis temores, “la primera y más grande victoria es conquistarse uno mismo, Ser conquistado por uno mismo es de las cosas más vergonzosas y viles” frase de Platón.
Tienes que ser bien consciente de que si tú creaste tu miedo sólo tú tienes el poder de deshacerlo.
Es un truco, una ilusión, muchas de nuestros miedos se deben a imágenes mentales; constantemente nos estamos contando historias de terror de algo que no ha sucedido y quizás nunca suceda.
Cambiando el dialogo interno y la manera como imagina las cosas
Primer paso para liberarte de tus miedos: cambiar la manera como te hablas, en vez de repetirte una y otra vez que “es imposible” “sucederá lo peor” sustitúyelo por palabras de valor, animándote, diciéndote que es fácil aunque al principio no te lo creas mucho.
Segundo paso; cambia tus imágenes mentales; si tienes miedo por ejemplo a las alturas y tu imagen mental es cayendo estampándote contra el suelo, debes visualizarte sintiendo la adrenalina disfrutando la experiencia, dueño de la situación , el aire en tu rostro gozando la experiencia.
Negociando con tus miedos
Debes saber que no será nada fácil vencerlo, así que imponte el reto; días antes ensaya mentalmente que todo te sale perfecto, convéncete de que será una situación placentera y sobre todo que será una batalla ganada. Debes conversar contigo mismo, imaginarte sereno, feliz .
Cuando llegue el día de hacerlo como ya te haz preparado mentalmente no te será nada difícil, mi consejo es que aunque las manos te suden y el corazón lata tan rápido que tengas miedo a que se te vaya a salir de su lugar, no temas tomar acción, si lo haces en ese momento habrás vencido. No lo pienses,¡ actúa!
Nuestros miedos más profundos son nuestros demonios internos, la manera de vencerles es enfrentarlos uno a uno hasta que se hayan esfumado todos, solo así habrás conquistado tu espiritú.